DOQ Priorat

Los vinos del Priorat están íntimamente ligados a la Cartuja de Escaladei.

Fueron sus monjes, originarios de la Provenza, quienes introdujeron las técnicas de viticultura que evolucionaron, a lo largo de los siglos, hasta lo que hoy es la actual D.O.Q. Priorat. Esculpido en las montañas, el paisaje intrincado discurre entre pendientes de pizarra. Un territorio al que los agricultores se han sabido adaptar cultivando las que son las uvas más caras de España.

¿Las variedades? Principalmente dos: la cariñena y la garnacha tinta, aunque también encontramos cabernet sauvignon, merlot y syrah.

¿Sabías que?

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Tras Desamortización de Mendizábal, los agricultores de la zona pudieron dedicar sus esfuerzos al cultivo de la vid, iniciando una cultura y un prestigio del vino que perdura hasta nuestros días.

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La plaga de la filoxera devastó la zona del Priorat y causó una gran emigración hacia las ciudades. Hasta 1950, año de creación de la D.O, no se volvió a plantar vid.

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A partir de 1980 se inició un nuevo ciclo de progreso en la región, en el que paisaje, agricultura y tradición se unieron para transmitir calidad y renombre a los vinos de Priorat.

Características de la D.O.Q. Priorat: un terreno abrupto que obliga al máximo esfuerzo.

Si algo caracteriza la D.O.Q. Priorat es la personalidad de su paisaje. La orografía escarpada es la que marca la disposición de los viñedos, que se extienden en pendientes y terrazas en las laderas de la sierra de Montsant.

La «llicorella» (o pizarra) es predominante en el terroir, y aporta a los vinos del Priorat una identidad inconfundiblemente mineral.

Algunos números

17 l / ha

El rendimiento más bajo de España. En el Priorat se producen menos de 3 millones de litros de vino al año. Esto da como resultado vinos con una concentración excepcional.

+90 bodegas

Bodegas se reparten un territorio de menos de 500 km2 . El 96% de la producción es de uvas tintas.

< 400 mm

De precipitación anual. El Priorat presenta un microclima mediterráneo con lluvias irregulares e importantes oscilaciones térmicas.

Y sus consecuencias:

El clima y el terreno se conjugan en la D.O.Q. Priorat para dotar a sus vinos de una personalidad fácil de reconocer. Se trata de vinos intensos y complejos en los que los aromas frutales y minerales cobran protagonismo. De elevada concentración alcohólica, su paso por la boca es seco y robusto.

Y para muestra, dos propuestas de Hammeken Cellars hechas en el Priorat: